No sé si a vosotros os pasará, pero yo de vez en cuando uso alguna palabra o locución poco común cuyo significado creo conocer.
Y, sin embargo, ese significado puede no ser cierto del todo. Hoy quería hablaros de unos pocos casos más o menos habituales.
- Electrocución. No es lo mismo sufrir una descarga eléctrica que electrocutarse. Al menos, no lo es en todos los casos. Si alguien se electrocuta es evidente que recibe una descarga eléctrica, pero esta es con resultado fatal.La razón es sencilla: el verbo electrocutar proviene del francés, électrocuter, y este a su vez del ingés, to electrocute, acrónimo de electro- y execute; vamos, ejecutar usando la electricidad.
- Interfecto. Seguro que alguna vez habéis leído esta palabra usada como sinónimo de persona. Pues sí, un interfecto es una persona… que ha muerto violentamente.
- Making-of. El tan de moda «cómo se hizo» o «detrás de las cámaras» se escribe así, con una sola «f» y con guion. No es making off.
- Locuciones latinas. Sí, mola usarlas ¿verdad? Pero hay que tener cuidado con escribirlas y pronunciarlas correctamente. Aquí pongo dos ejemplos claros donde suelen ponerse preposiciones indebidas: motu proprio, que se utiliza con el significado «por propia iniciativa», debe ir escrito así, sin ninguna preposición anteponiéndose y con dos erres en la segunda palabra. No es correcto de motu proprio ni motu propio. De la misma forma, grosso modo, usado como sinónimo de «a grandes rasgos», tampoco llevaría preposición. Sería erróneo a grosso modo.
Espero que estas pequeñas aclaraciones os hayan servido.
(Fuentes: http://www.rae.es/ y http://www.fundeu.es/)